Reseña de «El exterminador fantasma» de Donald Curtis

No tengo claro qué me llevó a leer este bolsilibro. Quizás porque escuché por ahí que este western tenía ciertos toques de weird, tal vez fue porque su autor no suele fallar en proporcionar un buen rato de diversión con este género, o incluso es probable que se tratase sencillamente de una decisión al azar entre ese abundante mar que supone este formato de la literatura popular patria.

Juan Gallardo Muñoz - Donald Curtis

El caso es que esta novelita cayó en mis manos y paso a reseñarla de manera somera.

El exterminador fantasma forma parte de ese tramo final de producción del maestro Juan Gallardo Muñoz, buscando cobijo en la editorial Astri tras el cierre de Bruguera.

Recuerdo que leí en su biografía que, a pesar de ser uno de los autores españoles más prolíficos y relevantes de los bolsilibros, tuvo ciertos problemas económicos y en esta casa encontró el vehículo para seguir publicando y pagar sus facturas.

Publicada por primera vez en el '87 en la colección Oeste, siendo más tarde reeditada en Diligencia en el '94 y por último en Far West en el '97; algo bastante habitual en esta editorial lo de reciclar material original de ciertos autores.

Por lo tanto, estamos ante un Donald Curtis con una gran veteranía, con muchas novelas escritas y páginas a sus espaldas. En El exterminador fantasma nos propone una historia bastante original para tratarse de un western, por lo menos en su premisa y escenario principal.

Casi todo el bolsilibro se va a desarrollar en una taberna destartalada con un montón de feriantes de un rodeo que se ven atrapados en ella por las inclemencias meteorológicas.

A poco que empezamos a leer, nos daremos cuenta de que Gallardo teje una trama con la excusa de una tormenta de mil demonios que mantendrá a los personajes en ese escenario sin posibilidad de escape. ¿Para qué?

Para mezclar ingredientes de otro género muy distinto al del lejano Oeste: el policiaco. Para ser más concretos, el whodunit. Sí, porque durante el transcurso del bolsilibro vamos a estar inmersos en una serie de asesinatos y el clásico ¿quién lo ha hecho?

El autor busca y consigue una originalidad dentro del western no solo al encerrar a los protagonistas en un lugar confinado y lleno de sospechas sazonado con toques detectivescos, sino que además lo hace en un gremio de los profesionales del rodeo o aquellos hombres y mujeres que de forma itinerante se dedicaban a dar diversión y espectáculo en aquel Far West.

Con semejantes mimbres ya tenemos todo listo para disfrutar de una novelita del Oeste en manos de un Donald Curtis que ya era perro viejo para esas fechas y se siente como pez en el agua en estas lides.

¿Qué es lo que ha hecho que El exterminador fantasma no me entusiasme demasiado?

Pues con casi toda seguridad un problema mío. Ya que dicen que entre magos nos vemos los trucos, y ya me gustaría estar a la altura de este respetado autor, pero creo que esta vez sí le vi la carta que juega Gallardo en esta particular partida de póker y aposté enseguida a un posible culpable… y sí, gané la apuesta.

La misdirection que intentó el autor se ve que tuve suerte y la detecté desde la primera frase y eso me privó de la sorpresa final y, al fin y al cabo, del placer que tienen este tipo de obras basadas en ¿quién será el inesperado asesino?

Por lo demás, leer a este escritor es prácticamente una apuesta segura...

Por cierto, aunque no lo mencioné antes, El exterminador fantasma no tiene ningún componente de weird western, a pesar de lo que su título podría sugerir.

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